La creación de plusvalía absoluta por el capital —más trabajo objetivado— tiene como condición que se amplíe el ámbito de 1a circulación y que se amplíe además constantemente. La plusvalía creada en un punto requiere la creación de plusvalía en otro punto, por la cual ella se pueda cambiar; aunque en un primer momento se trate solamente de producción de más oro y plata, de más dinero, de forma tal que, si la plusvalía no puede convertirse inmediatamente de nuevo en capital, pueda existir en la forma del dinero como posibilidad de nuevo capital. Una condición de la producción basada sobre el capital es, por lo tanto, la producción e un círculo de la circulación continuamente ampliado, bien sea que el círculo es directamente ampliado, o que son creados más puntos en el mismo como puntos de producción. Si la circulación se presentaba al principio como una magnitud dada, aquí se presenta como una magnitud variable, y como una magnitud que se expande mediante la producción misma. Consiguientemente, la circulación se presenta como un momento de la producción. De la misma forma que el capital tiene por un lado la tendencia a crear continuamente más plustrabajo, también tiene por otro la tendencia complementaria de crear más puntos de cambio; es decir, aquí desde el punto de vista de la plusvalía absoluta o del plustrabajo absoluto, el capital tiene la tendencia a necesitar más plustrabajo como complemento de sí mismo; au fond el capital tiene la tendencia a propagar la producción basada sobre el capital o el modo de producción a él correspondiente. La tendencia a crear el mercado mundial viene dada inmediatamente en el concepto de capital. Todo límite se presenta como un límite a superar. Ante todo el capital tiene la tendencia a someter todo momento de la producción al cambio y a negar la producción de valores de uso inmediatos, que no entran en el cambio, es decir, tiene la tendencia a co1ocar precisamente la producción basada sobre el capital en lugar de modos de producción anteriores y, desde su punto de vista, primitivos. El comercio ya no se presenta aquí como una función que tiene lugar entre producciones independientes para el cambio de su excedente, sino como un presupuesto esencial omnicomprensivo y como un momento de la producción misma.